Masaje terapéutico que combina el masaje manual con la aplicación y posterior masaje con piedras, volcánicas o de rio, previamente calentadas a 50º.

El calor de las piedras, resistente y de larga duración, hace que la musculatura se relaje favoreciendo la disminución de las contracturas. Al mismo tiempo el calor aumenta el riego sanguineo y la actividad celular lo que permite una mayor eliminación de residuos metabólicos como por ej. el ácido láctico. Por todo esto es un masaje muy adecuado para las personas con dolores de tipo reumático o que sienten que el frio "les llega hasta los huesos".

Relajante y reconfortante,completamos los beneficios terapéuticos de las piedras calientes con la Aromaterapia personalizada, buscando siempre el máximo equilibrio.